El pan de hoy pretendía ser una "Focaccia" pero quizá por no haber amasado bien o cualquier otro problema técnico ;-) la masa creció hacía arriba y aunque el pan ha estado riquísimo y digo estado porque ya no quedan ni las migas, ha salido con más pinta de pan que de Focaccia, pues nada no hay problema, le cambio el nombre y listo. Ahora no pienso rendirme, la Focaccia vendrá otro día, tendré que imbuirme de todo lo que tenga que ver con este pan italiano para que en la próxima salga bordado.
Ingredientes:
- 450 grms. de harina de fuerza
- 225 ml de agua
- 25 grms. de levadura fresca
- 1 cucharadita de sal
- algo más de la mitad del aceite que hemos macerado
- Sal gorda
Preparamos un prefermento con la levadura desmenuzada en 100 ml de agua tibia. Removemos hasta que la levadura se disuelva y añadimos unos 100 grms de harina y volvemos a remover hasta conseguir una pasta homogénea, tapamos con film transparente y dejamos reposar como 1 hora. Este será el aspecto que presentará pasado ese tiempo.
Volcamos el prefermento (las cantidades utilizadas son del total de harina y agua, por lo que luego nos queda el resto) en la cubeta de la panificadora e incorporamos el resto de los ingredientes en el orden primero líquidos y después solidos. Seleccionamos un programa de amasado, en mi panificadora el 6 y lo dejamos hasta que termine el programa 1 hora 50 minutos.
Sacamos la masa y formamos una bola, enharinamos la superficie para trabajarla un poco y sacar el aire de la masa. Con las manos damos forma y la ponemos en la bandeja del horno, regamos con el resto del aceite que nos queda y echamos sal gorda y la dejamos reposar hasta que doble el volumen.
Precalentamos el horno a 200º, cuando alcance la temperatura bajamos a 180º y horneamos unos 25 minutos, dependerá del horno. Sacamos y lista para tomar con lo que más nos guste.
Buen Provecho!!!!